Rumbos
Proa al viento:
Es la única dirección en la que no podemos navegar. Esta posición nos servirá para parar la embarcación cuando nos sea necesario, por ejemplo, para atracar al muelle, para realizar un “rizo” a la vela si el viento sube.
Ceñida:
Navegamos en ceñida cuando el viento nos entra cerca de la proa de nuestro barco, es decir, por la amura a 45º con respecto al viento. Tendremos que llevar las velas cazadas según la intensidad del viento para que no flameen y estaremos muy atentos a que el barco no se aproe y se pare. Llevaremos la orza calada (metida) hasta abajo.
Través:
Es el rumbo más sencillo y cómodo para navegar. Vamos en través cuando el viento nos entra por el costado del barco a 90º con respecto al eje del viento. Llevaremos las velas poco cazadas, un poco más abiertas que en la ceñida, lo justo para que no flameen . ¡No por cazar más las velas se corre más! Subiremos un poco la orza, de esta forma el barco se deslizará mejor entre las olas, al ofrecer menos resistencia al mar.
Largo:
Es el rumbo más rápido, dependiendo de la intensidad del viento. Navegamos al largo cuando el viento nos entra por la aleta , a 135º con respecto al eje del viento y tendremos que amollar (soltar) las velas un poco más que en el rumbo de través, sin que llegue a flamear. Subiremos la orza hasta la mitad.
Empopada:
Es un rumbo muy tranquilo cuando hace poco viento y complicado cuando sube, sobre todo si hay olas. Vamos en empopada , cuando el viento nos entra por la popa, navegamos a 180º con respecto al eje del viento. Llevaremos las velas amolladas al máximo, poniendo el foque al lado contrario que la mayor para que esta no lo desvente. Esta posición de las velas, una a cada lado, se llama navegar en “ orejas de burro ”. Llevaremos la orza subida del todo.
Aquí os dejo un video explicativo con el que se os quedará más claro:
Más apoyo audiovisual, los cuales os ayudarán a entender la asignatura: